Tipos de Sistemas de Gestión de Calidad

SISTEMA DE GESTIÓN DE CALIDAD

4/4/20242 min leer

  • Sistemas normalizados: se utilizan de ejemplo para normas establecidas y códigos y prácticas acordados, como la certificación según normas ISO. La norma ISO 9001 establece los requisitos de un SGC completo y ofrece orientación a las organizaciones que desean implementar o mejorar su estrategia de gestión de la calidad.

  • Gestión de la calidad total (GCT): la GCT es una filosofía de gestión enfocada en la satisfacción del cliente a través de la participación activa de toda la plantilla. Su objetivo es apoyar la mejora continua de la calidad en todos los niveles y funciones empresariales.

  • Gestión ajustada: las ineficiencias pueden dar lugar a desperdicios innecesarios. La gestión ajustada se esfuerza por maximizar el valor para el cliente a la vez que minimiza los desperdicios utilizando herramientas como los mapas de flujo de valor, que ayudan a afinar los procesos de una organización para lograr una eficiencia óptima.

  • Seis Sigma: aunque la perfección es casi imposible de alcanzar, su búsqueda sigue mereciendo la pena. Seis Sigma utiliza técnicas basadas en datos para producir productos y servicios casi perfectos, con una tasa de defectos de 3,4 por cada millón de oportunidades. Aunque no es perfecto, se acerca bastante.

Viaje a la excelencia

El desarrollo de un sistema de gestión de la calidad eficaz no se produce de la noche a la mañana, sino que requiere una planificación y ejecución meticulosas. Entonces ¿cuáles son algunos de los pasos clave para el éxito de una organización que comienza su andadura con su SGC?

  • Garantizar el compromiso de los líderes: el desarrollo de un SGC requiere una alineación a nivel ejecutivo.

  • Documentar los procesos: identificar y documentar exhaustivamente los procedimientos asociados a los procesos de calidad existentes.

  • Definir métricas: deben determinarse unas métricas de seguimiento del rendimiento para garantizar que cumplen los requisitos del SGC.

  • Capacitación: todos los empleados necesitarán formación inicial y continua para comprender y comprometerse con el SGC.

  • Auditorías: las autoauditorías periódicas de los procesos y procedimientos garantizarán su cumplimiento y aplicación efectiva.

  • Revisar el rendimiento del sistema: evaluar periódicamente el rendimiento del sistema para introducir las mejoras necesarias.

Es importante señalar que, si bien los pasos descritos anteriormente proporcionan una visión general de alto nivel, la creación y el mantenimiento de un SGC eficaz requiere un esfuerzo y un compromiso considerables en múltiples áreas de una organización.

Un SGC puede basarse en normas nacionales o internacionales.

Los distintos SGC responden a necesidades y situaciones diferentes, y las organizaciones pueden optar por implantar uno solo o integrar una mezcla de distintos enfoques. Entre los más comunes se encuentran: